Escuela de Agricultura y Ganadería

Política de la Calidad Educativa

Agricu y DNV

 

 

Política de la Calidad Educativa

En una sociedad en permanente cambio, la escuela no puede permanecer ajena, por lo que es imprescindible pensar y construir la escuela del futuro, que se corresponda con los nuevos desafíos que se presentan en nuestro país y en el mundo. Hoy se le adjudica a la escuela el papel central de garantizar, a toda la población que pueda acceder a ella, los saberes, competencias y valores necesarios para desempeñarse en un mundo cambiante y globalizado. Construir una nueva escuela de calidad, implica pensar en una organización que aprenda, desde el paradigma del aprendizaje institucional. Actualmente la calidad total se fundamenta en la idea de la satisfacción del cliente (en el ámbito educativo se puede considerar la satisfacción del alumno y sus familias). El proceso de calidad total se inicia con el análisis del contexto, la detección de problemas y debilidades, la valoración de las fortalezas y oportunidades y la propuesta de determinadas soluciones planteadas en el FODA.E

La calidad, por otra parte, no es un concepto que puede definirse en términos absolutos, conlleva un posicionamiento político, social y cultural frente a lo educativo. El concepto de para que educar y a quienes va dirigida esa educación. No es lo mismo preparar en una escuela de extracción rural, que en el entorno complejo de una ciudad agroindustrial con diversas oportunidades laborales y posibilidades de estudios superiores para sus egresados. La eficacia no estará en conseguir un buen producto a partir de unas buenas condiciones de entrada, sino en hacer progresar a todos los alumnos a partir de sus circunstancias personales. En este sentido conviene enfatizar en la calidad de los procesos escolares, y evitar dar un valor absoluto a los productos obtenidos.

La escuela y su SGC reconocen, entonces, la creciente relevancia del contexto en el funcionamiento general de la institución y en particular de su SGC. De esta manera considera las expectativas de los alumnos (principales beneficiarios) y de las partes interesadas pertinentes dentro de este contexto y el cumplimiento de sus requerimientos en las medidas de sus posibilidades. Propone una gestión de riesgos tal que asegure una disminución de su impacto en el SGC y las posibles oportunidades de mejora.

Adopta el enfoque basado en procesos y la estrategia Planificar –Hacer-Verificar y Actuar como impulso para la mejora.

Y la Escuela y la Alta Dirección se comprometen a mantener y sustentar esta Política como marco para el Sistema de Gestión de la Calidad  y los objetivos institucionales para la mejora. Asimismo a implementar la Norma ISO 9001: 2015 y la aplicación de sus requisitos, teniendo como premisa los siete principios de la calidad y reuniendo la evidencia necesaria para generar confianza que los procesos y el SGC se desarrollan de acuerdo a lo planificado.

Certificar calidad educativa bajo las Normas ISO 9001:2015 implica mejorar el posicionamiento, la imagen y la eficiencia de las escuelas, con la meta de lograr la sustentabilidad  y “la licencia social para operar”